Una lesión, intoxicación, síntomas preocupantes… ¿Sabes cómo tienes que reaccionar ante el dolor de tu gato? ¿Cómo darle primeros auxilios de manera efectiva? ¿Cómo asegurarte de que no empeore?
Aquí tienes las respuestas a esas preguntas para que puedas estar seguro al llevar a tu gato al veterinario.
Una herida o corte: limpiar y desinfectar
Todo depende del tamaño de la herida y de dónde esté. Si es un corte superficial, primero debes asegurarte de limpiarlo bien. Evita a toda costa utilizar merbromina, y en su lugar usar agua y jabón o Betadine. A continuación, aplica un spray antiséptico y cubre la herida con un vendaje, sin apretar demasiado. En tu casa debe estar presente un kit de primeros auxilios para gatos que incluya estos elementos (o en su caso comprar uno en una tienda de mascotas).
La herida se debe limpiar regularmente y cada dos días cambiar el vendaje hasta que esté completamente curada.
Ten cuidado y consulta un veterinario en cuanto notes que el comportamiento de tu gato ha cambiado un poco.
Si la herida es profunda, esté sangrando o no, debes consultar a un veterinario de inmediato. Si hay hemorragia, aplica presión sobre la herida y pon otro vendaje encima del que ya está.
Si la hemorragia es grande debes aplicar la presión directamente sobre la arteria en cuestión hasta que un veterinario lo examine.
Intoxicación: lo que no debes hacer
Existen muchos tipos diferentes de intoxicación:
- Si es por contacto, puede haber irritación o hinchazón. Puedes lavar el área afectada con abundante agua antes de acudir a un veterinario.
- Intoxicación a través de ingestión, los síntomas son variados y no necesariamente aparecen todos a la vez, ya que algunos pueden llegar a aparecer más tarde. Los síntomas suelen ser: vómitos, diarrea, problemas respiratorios, tos…
No proporciones a tu gato ningún tipo de medicamento aunque sepas qué fue lo que le causó ese envenenamiento. Y, sobre todo, evita a toda costa que tu gato beba, especialmente leche.
No intentes provocarle a tu gato vómitos. Ésto puede acentuar todavía más los efectos y agravar o causar lesiones.
Claves para ayudar al veterinario con el diagnóstico
Cualquier pista sobre la intoxicación podría ayudar al veterinario con su diagnóstico y poner en marcha un tratamiento adecuado. No rechaces ningún tratamiento por muy extraño que suene o parezca. Tu veterinario es un profesional y te recomendará lo mejor.
Quemaduras: evaluar el grado
Una quemadura, por muy pequeña que parezca, requiere mucha atención.
Primero, intenta enfriar la quemadura con agua fría. Después, seca delicadamente el área afectada. Ni pomadas ni hielo deben aplicarse sobre la herida. Tampoco se debe usar un algodón para secar, sino una gasa.
Pon especial atención a la reacción de tu gato. Igual que se trata con delicadeza la herida, a tu gato también debes acariciarle suavemente para mantenerle calmado. Aunque el gato sea muy dócil, el dolor puede hacer que actúe de manera agresiva.
Según el tamaño de la quemadura y su grado, puede que necesite estar ingresado. Si posees un seguro de mascotas, todo esto será pagado o reembolsado según las condiciones del seguro, como cualquier otro accidente o enfermedad.
Una caída: sé delicado
En este caso, debes evitar tocar a tu gato tanto como sea posible. De camino al veterinario, colócale un manta para que se sienta calentito, arropado y tranquilo.
No nos olvidemos de mencionar el modo de conducción una vez esté tu gato dentro del coche. Toda precaución es poca. Evita baches y giros bruscos.
Pero, antes de hacer nada, llama a tu veterinario para que te diga lo que debes hacer y lo que no, así evitaremos cualquier error que pueda traer graves consecuencias.
Diarrea, vómico: cuándo preocuparse y qué hacer
Si en las descomposiciones y/o vómitos encuentras sangre, consulta al veterinario inmediatamente.
Los vómitos y descomposiciones en gatos pueden ser transitorios, pero si el estado de tu gato no mejora después de 24 horas debéis ir a vuestro veterinario de confianza.
Fuente: Santévet