A medida que el tiempo pasa, nuestro compañero de vida va siendo menos ágil y, desde luego, pasa más tiempo durmiendo que antes. Se ve que sus capacidades físicas y mentales disminuyen gradualmente. Sin darte cuenta tendrás un perro viejito a tu lado.
Sin embargo, no todo va a ser malo, ya que te traemos algunos consejos para ayudar a tu perro a mantenerse saludable.
Respeta su tranquilidad
En primer lugar, hay que tener paciencia, respetar su nuevo estilo de vida e intentar no perturbarle.
Para que tu mascota disfrute de la máxima comodidad posible, cómprale un colchón o una camita lo suficientemente gruesa para que no note el frío y la dureza del suelo.
Algunos movimientos comenzarán a serle más difíciles de hacer debido a la artrosis que los perros mayores empiezan a sufrir. Si tu estado físico te lo permite, ayuda a tu perro cogiéndole en brazos siempre que sea necesario. Por ejemplo, cuando quiera subir o bajar de la cama.
Adapta la alimentación a sus necesidades
Es necesario que su alimentación vaya cambiando y se adapte lo mejor posible a su estilo de vida y a sus necesidades nutricionales. De hecho, debes asegurarte de reducir los alimentos grasos y comprar más alimentos ricos en proteínas, minerales y vitaminas.
Si estás perdido con las comidas, siempre puedes consultar a tu veterinario de confianza.
Ejercicio físico
Al igual que los humanos, el ejercicio físico es beneficioso para los perros.
Sabemos que el sobrepeso tiene un efecto perjudicial sobre la longevidad y la calidad de vida del perro. Además el ejercicio practicado con regularidad mejora la calidad del sueño y preserva la masa muscular del animal.
Pasear con tu perro con frecuencia, pero en períodos cortos, es un buen tipo de ejercicio para ambos, ya que sus articulaciones no se sobrecargarán.
Vigila el estado de sus dientes
Como otro cuidado más, los dientes de tu perro requieren especial atención, ya que a medida que envejece, la placa bacteriana se va endureciendo y el sarro aparece en mayor medida. Esto puede provocar gingivitis e incluso pérdida de dientes.
Por lo tanto, deberás cepillar los dientes del animal con bastante asiduidad. La mayoría de las clínicas veterinarias ofrecen limpiezas bucales eliminando el sarro y el mal aliento, por lo que resultan bastante eficaces.
Lleva a tu perro al veterinario con regularidad
Con el tiempo, tu mascota se va volviendo más frágil. Pueden empezar a aparecer problemas del corazón, articulaciones, ojos, gastrointestinales o en los riñones.
A partir de los ocho años, es recomendable ir al veterinario para que le hagan un diagnóstico de posibles problemas. Si nunca tu perro ha tenido algún problema o enfermedad, el veterinario le recetará un tratamiento médico adecuado.
Y tú ¿sabes cómo cuidar de tu perro viejito?