¿A tu gato le encanta rascar la tierra de tus maceteros? ¿Se sirve incluso de arenero? ¡Este artículo es para ti!

Aquí tienes algunos consejos:

Astucia n°1: los cítricos

A los gatos no les gusta el olor de los cítricos, y a algunos incluso les repulsa. ¡Sácales partido! Pon unos trozos de piel de naranja, limón o pomelo a los pies de la planta. Tu gato se alejará incluso cuando tengas la sensación de que ya no huele a cítricos.

Astucia n°2: las canicas

La ventaja de esta segunda astucia es que pueden resultar bonitas dentro de casa. Coloca una capa de piedrecitas de cristal, canicas o grava de acuario en el macetero. ¿Alguna vez has intentado andar sobre canicas? A tu gato no le gustará caminar sobre ellas, y cuando rasque un poco, no encontrará tierra, por lo que pensará que la tierra ha sido sustituida por completo.

Astucia n°3: los tenedores de plástico

Para este truco, puede que tengas que cortar el mango de los tenedores que utilices, todo depende de la profundidad del macetero. «Planta» unos tenedores en la tierra, de manera que algunos milímetros de los dientes de los tenedores sobresalgan. Colócalos de tal forma que tu gato no tenga más remedio que caminar sobre los tenedores. Esto no le hará daño, pero las ganas de instalarse a los pies de tu planta se le irán enseguida.

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