Una vez que se diagnostica la causa, es más fácil tratar una otitis. Descubre los diferentes tratamientos de la otitis externa en los gatos y perros.
Tratamientos de la otitis externa por vía local
Primero de todo, debes saber que la mayoría de las otitis externas se pueden curar con un tratamiento por vía local, es decir, administrado directamente en el conducto auditivo.
Para ello, se debe comenzar con una limpieza de la oreja si el cerumen es abundante. En tal caso, el veterinario te proporcionará una solución limpiadora que te permitirá retirar los cúmulos de cerumen, así como las impurezas sin dañar el frágil revestimiento del conducto.
Para administrar la solución limpiadora, deberás aprender a seguir ciertos pasos:
- Sujeta el pabellón auricular bien recto e introduce el conector del producto limpiador en la abertura del conducto.
- Presiona el frasco con fuerza con el fin de aplicar una buena cantidad de producto.
- A continuación, masajea la base de la oreja para que el producto se reparta bien y se despeguen las impurezas. Debes hacerlo con cuidado y con especial delicadeza si tu compañero tiene dolores.
- Seca el excedente con una bola de algodón.
- Deja que tu animal sacuda la cabeza, esto ayudará a la limpieza de la oreja. Seguidamente, vuelve a secar.
Una vez que la oreja esté limpia, déjala secar durante unos 10-15 minutos antes de instilar el producto de tratamiento que tu veterinario te haya prescrito.
Los productos que se prescriben suelen ser gotas o pomadas óticas, siendo esta última más espesa que la primera. Estos medicamentos siempre se proporcionan con receta, ya que tu veterinario adaptará la prescripción según el animal y la causa de la otitis. Además, según el producto y tu mascota, puede variar el ritmo de administración, desde una a varias aplicaciones al día. Por último, tu veterinario debe verificar la integridad del tímpano antes de la prescripción.
Estos medicamentos óticos pueden contener varios principios activos, únicos o combinados:
- Antiinflamatorios: calman la inflamación y alivian el dolor.
- Antibióticos: luchan contra las bacterias.
- Antifúngicos: luchan contra los hongos.
- Antiparasitarios: como su propio nombre indica, luchan contra los parásitos de la oreja.
Según la intensidad del dolor, el veterinario puede administrarle una inyección analgésica, la cual actuará contra el dolor. Es muy importante que respetes el ritmo de administración y la duración del tratamiento para que las posibilidades de recuperación sean mayores.
Aunque constates una mejora al cabo de varios días, debes terminar el tratamiento, ya que de lo contrario corres el riesgo de exponer a tu compañero a una recaída, la cual será más difícil de tratar. Sin embargo, no le administres una cantidad mayor de lo que se le ha prescrito. Ya que esto no acelerará la cura y puede tener efectos secundarios.
Tratamientos de la otitis externa en caso de cuerpo extraño
Si la otitis de tu perro o de tu gato está causada por la presencia de un cuerpo extraño, como trocitos de gramíneas, también conocidas como espiguillas, estás deberán retirarse.
Para ello, se aplicará por lo general un tranquilizador. El objetivo de esta sedación es evitarle sufrimiento a tu mascota.
Una vez que se haya retirado el cuerpo extraño del conducto auditivo, el veterinario suele administrar una inyección analgésica y podrá prescribir un tratamiento local para finalizar la cura.
Otitis alérgica: identificar el alérgeno
Identificar la causa de la alergia (también llamado alérgeno), suele ser un procedimiento largo. El veterinario debe realizar exámenes complementarios, de entre los cuales se destacan las pruebas intradérmicas. Para ello, se inyecta en la dermis una pequeña cantidad de alérgenos, en especial a los perros, que suelen ser los más afectados. Este examen se practica en la zona lateral, cerca del tórax, habiendo rasurado previamente la zona. No te preocupes por el factor estético, los pelos crecerán.
Una vez se haya(n) identificado el/los causante(s), debes procurar eliminarlos del entorno de tu mascota, e incluso probar una insensibilización. Tu veterinario sabrá aconsejarte cuál es la más adaptada para tu mascota y cuáles son los resultados esperados.
Tratamientos quirúrgicos en casos extremos
Si la otitis es crónica, reincidente o resistente a los tratamientos clásicos, tu veterinario puede optar por una operación quirúrgica como solución.
Asimismo, los pólipos y tumores también suelen necesitar un tratamiento quirúrgico. Una vez más, tu veterinario es la persona más apta para establecer y explicarte el tratamiento más adaptado.
Prevenir la otitis reincidente, dos veces bueno
Una vez que la oreja esté bien curada, es importante que evites las reincidencias. Para ello, como hemos dicho anteriormente, lo primero que debes hacer es efectuar un tratamiento en su totalidad.
Si tu perro tiene pelos en el conducto auditivo, te aconsejamos que lo depiles. Este paso no es muy complicado de hacer, y el auxiliar de la clínica veterinaria a la que vas o el peluquero canino que se suele ocupar de tu perro te podrá mostrar cómo hacerlo. Sin embargo, si no te sientes seguro haciéndolo, puedes pedirle a un profesional que lo haga.
Para la limpieza de las orejas, utiliza siempre un producto de higiene veterinaria que te garantice una inocuidad perfecta. Nunca introduzcas un bastoncillo u otro objeto en el conducto auditivo.
Si tienes alguna pregunta sobre el tratamiento de tu perro o de tu gato, no dudes en dirigirte al auxiliar de la clínica veterinaria en la que se lleva el seguimiento de tu peludo, gracias a sus conocimientos podrá aconsejarte y sabrá orientarte acerca de una posible consulta.
Queremos agradecer a la ESAV (Escuela Superior de Veterinaria) – Instituto Bonaparte por habernos ayudado con este artículo.