Una de las actividades favoritas de los hámsters es, sin duda, utilizar la rueda. Les mantiene activos no sólo a nivel físico, sino también mental, siendo un gran ejercicio para estimularles.
Algunos hámsters dejan de usar su rueda y otros, directamente, las evitan por completo. Aquí es cuando surge la pregunta ¿por qué mi hámster no usa la rueda? Mientras, su comportamiento sigue siendo de lo más normal.
La edad de tu hámster
A veces no somos conscientes de ello, pero nuestra mascota envejece igual que nosotros. Por mucho que nos neguemos a la idea de que ya no es un cachorro.
Por eso, quizás de un día para otro dejen de hacer una actividad física por mucho que les gustara cuando eran pequeños. O en cuanto a hámsters, pueden dejar de usar su rueda.
Por ejemplo, la artritis es una enfermedad muy típica en los hámsters mayores. Lo que quiere decir que si tu mascota tiene esta enfermedad en alguna de sus articulaciones, puede resultarle incómodo y hasta doloroso correr en la rueda.
Si tu hámster está mayor y deja de usar la rueda, lo mejor será que visites al veterinario. Un profesional será el único que pueda descartar enfermedades propias de la vejez, como la artritis y recomendarte un régimen alimenticio que lo aleje de una posible obesidad.
El tamaño de la rueda
Una de las razones más comunes por las que los hámsters dejan de usar las ruedas es porque han crecido y les quedan pequeñas. Les resulta incómodo y en algunos casos hasta doloroso porque deben arquear demasiado sus espaldas para realizar cualquier movimiento. Es importante, que cuando tu mascota use la rueda, su espalda se encuentre totalmente recta. Si ésta se arquea, puede traer severos problemas.
Lo mejor es escoger la rueda más grande para hámsters, sobre todo cuando el animal es pequeño y no sabes cuanto puede llegar a crecer. La otra solución, sería sacarlo a jugar a algún jardín controlado en donde pueda ejercitarse.
El diseño de la rueda
Muchas veces nos olvidamos que los animales también tienen gustos, igual que nosotros. Quizás a tu hámster no le gusta precisamente esa rueda que has comprado, la rueda no gire de la forma que más le agrada o le parece incómodo el material. Por ejemplo, las ruedas de barrotes pueden crear problemas en las garras y aumentan las posibilidad de que tu mascota se disloque o rompa alguna de las extremidades. También puede ocurrir que no pueda moverla, por lo tanto, tarde o temprano dejará de intentar rodar en ella.
Las ideales y que más le gustan a los hámsteres son las de plástico o de madera que tienen un suelo sólido. Si tienes una rueda de barrotes, una solución casera es pegar un cartón rugoso por toda la rueda asemejando un suelo liso pero que no sea resbaladizo. Si dispones del dinero intenta comprar un par de ruedas de diferentes diseños. De ésta forma, tu hámster se mantendrá más entretenido. Recuerda cortar bien la garras de tu mascota para que no tenga ningún accidente con la rueda.
Una rueda que hace mucho ruido
Una de las razones menos comunes es que la rueda sea escandalosa cada vez que tu hámster la utilice. Deberás asegurarte primeroqueruede con suavidad y que, ante todo, no haga ruido, ya que para algunos hámsters suele resultarles bastante desagradable y más si son nerviosos.
Aplica unas gotas de aceite de oliva para ver si al engrasarla deja de hacer ruido. Si ésto no ocurre, lo más seguro es que tengas que comprar otra rueda.
Hámster perezoso
Quizás tu hámster sea un tanto perezoso y no le guste moverse del todo. Ésto sucede en muchos casos y más aun si el animal es mayor porque están todo el día cansados y prefieren dormir y comer.
Ésto no es para nada extraño. De hecho, existen muchos casos donde el hámster casi ni toca su rueda. Intenta descubrir el carácter de tu mascota. Recuerda que no todos los hámsters tienen la misma personalidad... Algunos son más activos, otros más sedentarios.
Prueba con otros juegos
No importa si tu rueda tiene el mejor diseño y es la más bonita y original del mundo. Tal vez a tu hámster, directamente, no le gusten las ruedas. Si éste es el caso, no insistas en que la use, prueba con otras opciones como los árboles trepadores o torres.
Por otro lado, hay hámsters que prefieren andar sueltos libremente por la casa, subir y bajar las escaleras, correr en la cama. Deja que tu mascota experimente en su propio hogar. Eso si, mientras esté suelo tendrás que estar atento. Los hámsters son animales muy pequeños, curiosos y pueden perderse con (mucha) facilidad.
¿Le gusta a tu hámster su rueda, o ha dejado alguna vez de usarla?
Fuente: Experto Animal