Una reserva para animales en zonas de guerra

Actualmente, unos veinte animales salvajes han sido traídos de su país en guerra para poder beneficiar de cuidados específicos para liberarlos de sus traumatismos. En total, se cuenta con cuatros osos, veinte leones y dos tigres de Bengala. La mayoría de esos animales fueron salvados de zonas en guerra.

Una reserva adaptada a las necesidades de los animales

La organización Four Paws ha llevado a cabo este proyecto. Efectivamente, la organización quiso ayudar a los animales en peligro del mundo entero.

Más de cien animales han sido acogidos de zonas en guerra peligrosas como, por ejemplo, Gaza, Irak o Siria. Tras ser socorridos, los animales fueron transferidos a la clínica veterinaria New Hope Centre para beneficiar de exámenes y de tratamientos adaptados. El portavoz de Four Paws afirmó que «la mayoría de los animales estaban desnutridos y necesitaban asistencia medica. Estaban muy flacos y el estado de sus dientes era lamentable”.

Tras los análisis, algunos animales fueron trasladados hacia su país de origen, mientras que algunos pudieron integrar la reserva.

No confundan «reserva» y «zoo»

Efectivamente, es importante saber que la reserva no es para nada un zoo y que está dedicada a la salud y bienestar de los animales. Los empleados de la reserva ayudan a que los animales se restablezcan gracias a juegos, una alimentación equilibrada y a la aromaterapia. Esta práctica consiste en dejar en un cubo hierbas aromáticas como camomila o canela. Los visitantes también pueden venir a visitar los animales para pasar tiempo con ellos.

Traumatismos difíciles

Aunque se les administre todos los cuidados posibles, algunos animales sufren mucho y no pueden pasar a otra cosa fácilmente. Hablemos por ejemplo de Loz y Sokkar, dos osos negros de Asia que fueron socorridos en un Zoo de Alepo, Siria. Algunos elementos les traen malos recuerdos. «Cuando llegaron, Loz y Sokkar estaban atemorizados cada vez que oían pasar un avión. Durante más de un año, se escondían al oírlos pasar » Precisa Khaled Ayasra, empleado de la reserva.

Actualmente, los animales se acostumbran poco a poco a la tranquilidad que les ofrece su nueva vida.

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Imagen de ilustración.

Fuente: le parisien.