En este artículo vamos a explicar todo acerca de las necesidades nutricionales de un gato, entre ellas proteínas, aminoácidos, lípidos, minerales…
El gato es un animal al que le gusta hacer varias comidas pequeñas al día. Su dieta deber ser equilibrada para satisfacer tanto las necesidades nutricionales específicas, siempre dependiendo de su estilo de vida.
Un aporte suficiente de proteínas
Al ser un animal carnívoro bastante estricto, su dieta debe ser rica en proteínas. Muchas de las proteínas (las cuales obtiene entre un 30% y un 40% de los alimentos que come), ayudará a que tenga un buen pelaje, garantizando el crecimiento y la renovación del mismo.
También, las proteínas son importantes para la piel del gato. Al igual que lo son para sus músculos y huesos.
Aminoácidos esenciales
El suministro de aminoácidos es esencial. Si tu gato no recibe las cantidades suficientes podría llegar a sufrir problemas en el corazón, sistema reproductivo o urinario, y también en los ojos.
Aunque necesiten aminoácidos, el cuerpo de un gato es incapaz de digerir todos. En todo caso, hay que poner especial atención en que la dieta contenga taurina y arginina suficientes.
Cuidado con las grasas
Tu minino necesita grasas de origen animal en su dieta, pero su consumo debe hacerse en función de su estilo de vida. Un gato es un animal sedentario, y el riesgo de sufrir obesidad es alto. Este es un problema que afecta cada vez más a los gatos domésticos. Intenta jugar todo lo que puedas con él , haciéndole correr por toda la casa para que sus músculos no se atrofien y no comience a ganar peso.
Con el fin de que el gato se mantenga en su peso ideal y saludable, estas grasas animales se le tendrán que suministrar de manera acorde con su día a día.
Si quieres saber si tu gato sufre de obesidad, lee nuestro artículo en el que hablamos sobre ello.
Otras necesidades nutricionales
Los gatos tienes otras necesidades nutricionales que son esenciales, como los lípidos, que son una fuente de energía, vitaminas (A, D, y B1 particularmente), hidratos de carbono, minerales (calcio, fósforo, sodio, potasio, magnesio)… Los glúcidos, normalmente presentes en el almidón (como el arroz, por ejemplo) no son igual de útiles que los mencionados anteriormente. Por último, no olvidemos destacar el consumo de fibra ya que facilitará su tránsito intestinal.
Por lo tanto, para satisfacer las necesidades nutricionales específicas del gato es aconsejable elegir una gama alta de alimentos, ya sea de comida seca o húmeda. Dependiendo de la edad, la actividad y la salud del gato, siempre y cuando siga las dosis diarias, un alimento así traerá todo lo que el organismo del gato necesita.
Si, por el contrario, prefieres preparar tú las comidas en casa, debes estar seguro de que le das de comer correctamente a tu gato. De todas formas, no dudes en preguntar a tu veterinario acerca de las preparaciones y las dosis.
Para más información acerca de la comida para gatos, mira nuestro artículo sobre los alimentos más peligrosos para ellos.