Mike Lanigan era solo un niño cuando lo llevaron a una granja con su familia. En los años que seguirían, criaría a sus animales para vender la carne en el mercado local.

Pero tras unos años de estudios y una temporada en el departamento forestal, Mike Lanigan decidió que era hora de transformar la granja en algo diferente. Se dio cuenta de que quizás estos animales con los que había crecido y tejido unos lazos muy fuertes, querrían envejecer en esa granja. Más allá de esta idea, quería ofrecer un refugio a otros animales que lo necesitaran.

En otras palabras: Mike Lanigan quería hacer de su granja un santuario para animales.

mike con vaca

«Es el primer año que no criamos cerdos ni pollos» ha declarado Mike en un vídeo reciente de Edith Barabash, que trabaja con él en «Farmhouse Garden Animal Home», su santuario.

La granja cuenta con 21 vacas, así como caballos, ocas y un «asno de guardia» llamado Buckwheat.

mike con el asno

Sin embargo, Mike piensa regalarles un poco de compañía. «He pensado que tal vez podríamos empezar adoptando vacas que vivan en un refugio o asociación».

Lanigan se ha inspirado, en gran medida, de un anciano trabajador agrícola que había visto trabajar para su padre. «Solía ver cómo este viejito, que tendría más de 90 años, se ocupaba de nuestros terneros con mucho amor», declara Mike.

Unos años más tarde, mientras ayudaba a una vaca a dar a luz, Mike Lanigan se acordó de este hombre. «Tenía la sensación de que era hipócrita por mi parte dar tanto amor a estos animales y que sin embargo acabaran así», añade Mike.

Evidentemente, el camino para construir el santuario está cargado de buenas intenciones. Una cosa es transformar la granja en santuario, y otra muy diferente es querer alimentar todas esas bocas. Hoy por hoy, la granja no es oficialmente un santuario.

vacas en la granja

«No tenemos fecha límite, pero cuanto antes mejor. Necesitamos una gran cantidad de dinero para empezar, ya que alimentar vacas es algo bastante caro. Sin embargo, estamos seguros de que lo conseguiremos», declara Edith Barabash.

Por otro lado, un granjero también necesita comer. Mike continua plantando verduras y fabricando sirope de arce y madera, y revendiendo sus productos en el mercado.

Mike Lanigan tiene una página de Facebook en la que puedes seguir sus aventuras o incluso hacer un don.

¿Qué piensas de la iniciativa de Mike?

Fuente: thedodo

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