Si, como nosotros, eres un apasionado de los perros, seguramente tengas la impresión de que te pareces más a un perro que a una persona.
Las personas pueden ser malvadas y deshonestas, mientras que nuestros amigos los perros tienen la reputación de tener un gran corazón. ¿Por qué nos gustan tanto los perros? ¿Cuándo empezó todo? Bueno, los perros son condescendientes, juguetones, amables y carismáticos, a todos nos gustaría parecernos a ellos.
Todo te hace gracia
Los perros son muy bromistas, ¡y tú también!
Te encanta salir y conocer gente nueva
Aunque algunos perros son tímidos e introvertidos, a la mayoría le encanta encontrar gente nueva, y a ti te pasa lo mismo.
A veces eres un poco posesivo con los objetos que más te gustan
(Traducción: Cuando vuelves al coche y sientes el olor de otro perro)
Sí, podrías compartir, pero ¿seguro que te apetece?
Estar solo no es lo tuyo
No eres el tipo de persona a la que le gusta quedarse sola. Además, digas lo que digas, la gente tiene tendencia a sentirse atraída por ti e interesada por lo que dices.
Tienes dos modos: encendido y apagado
Todo o nada, se te reconoce fácilmente.
Siempre obtienes lo que quieres
Y no eres el tipo de persona que piensa ceder.
Ocupas toooooda la cama
En la cama hay que ponerse cómodos, ¿no?
Valoras mucho a tus amigos, la lealtad lo es todo para ti
Sientes un gran aprecio por tus amigos. Para ti, un amigo lo será para siempre. Además, eres muy leal con las personas que de verdad importan para ti.
Vivir contigo es facilísimo
… Hasta que un ruido extraño irrumpe en tu vida y acaba con tu tranquilidad (como el ruidito de la aspiradora el domingo a las 8 de la mañana).
Eres muy pegajoso con la gente que te quiere
¡Ven a mis brazos, lentejita! ¡Un lametón nunca está de más!
Los invitados inesperados serán recibidos de manera un poco particular...
Te gusta muy poquito que la gente se autoinvite a tu casa por la cara (es un poco lo que debe sentir tu perro cuando ve llegar al cartero).
Tras este test, ¿qué piensas? ¿Eres más perro que persona?